- DIRIGIDA POR EL DR. JUAN NAVARRO, FLEBÓLOGO ESPECIALIZADO EN VARICES CON MÁS DE 20 AÑOS DE EXPERIENCIA EN ESTE TRATAMIENTO Y MILES DE CLIENTES SATISFECHOS.
CON NUESTRO MÉTODO FIEM SE PUEDE TRATAR CUALQUIER TIPO DE VARIZ SIN NECESIDAD DE CIRUGÍA
Una variz es una vena “enferma”. En las venas la sangre debe circular en una única dirección y existen unas válvulas que evitan que la sangre tenga retroceso. Cuando estas venas fallan y la sangre no circula correctamente, se crea un estancamiento de la sangre que provoca un amento de presión en las zonas afectadas que da lugar a los síntomas varicosos:
- PESADEZ
- INFLAMACIÓN
- CALAMBRES
- HORMIGUEO
- ECT
Con el tiempo, la evolución puede dar lugar a cambios en la piel: Pigmentaciones, atrofia cutánea y, en su grado máximo, úlceras venosas.
Aproximadamente un 65% de la población presenta algún tipo de varices, por lo que es una patología con muy alta prevalencia.
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Las varices no son solo un tema estético y si no se tratan a tiempo, pueden dar lugar a una úlcera venosa. Por eso es importante acudir a un especialista si vemos una variz en nuestras piernas y no esperar a que duela.
Con una ecografía con ECO – DOPPLER, un médico especializado puede saber el estado vascular de las piernas y ver la gravedad real del problema.
En ocasiones pequeñas arañas vasculares son un síntoma de una variz más grave y al contrario, a veces varices que parecen más graves pueden eliminarse por completo con unas sesiones de escleroterapia.
El equipo médico del Dr. Juan Navarro, ha creado un tratamiento exclusivo llamado técnica FIEM y lleva más de 20 años utilizando está técnica para tratar varices.El tratamiento consiste en eliminar la vena enferma con un producto especial para ello, que la obstruye para que luego el cuerpo la reabsorba. Aquí es donde las manos del profesional son primordiales para saber donde y con que mezcla de producto se debe hacer para que el resultado sea el mejor.
Por lo general no se considera un tratamiento doloroso. Si bien todo depende de la sensibilidad de cada persona, la única molestia del tratamiento son los pequeños pinchazos que se realizan para introducir la espuma esclerosante.